acción por el clima

ODS 13: Acción por el clima

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La Tierra tiene en la actualidad una temperatura superior a la que tenía en el siglo XIX. En 2015 se firmó el Acuerdo de París, en el que 196 estados tomaron el compromiso de evitar que la temperatura global supere los 1,5 °C por encima de los niveles preindustriales. Para ello se comprometían a reducir los gases con efecto invernadero, principales causantes de este calentamiento global. Sin embargo, nos encontramos a las puertas de superar este límite, con una clara afectación en los sistemas terrestres y marinos. Naciones Unidas señala que el cambio climático es el mayor riesgo global al que se enfrenta la población mundial en su conjunto, afectando,  sobre todo, a los más vulnerables. En este artículo profundizaremos en los riesgos y efectos del calentamiento global y el ODS 13 que trata sobre la acción por el clima.

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¿De qué trata el ODS 13 sobre la acción por el clima? 

La Organización Metereológica (OMM) ha confirmado que en 2023 la temperatura media anual del planeta estuvo 1,45 ± 0,12 °C por encima de los niveles preindustriales (1850-1900), justo en los límites establecidos en el Acuerdo de París. Las temperaturas mundiales registradas en cada uno de los meses entre junio y diciembre marcaron nuevos récords mensuales, y julio y agosto fueron los dos meses más calurosos de los que se tiene constancia.

Estos nuevos récords de temperatura afectan a la altura del nivel del mar y a la reducción de los polos terrestres. Las pautas de precipitación están cambiando, volviéndose más húmedas las regiones que ya lo son y más áridas las secas. El volumen de los glaciares y la cobertura de nieve están disminuyendo, y los fenómenos extremos relacionados con el clima, como las olas de calor, las precipitaciones intensas y las sequías, se producen con cada vez más frecuencia e intensidad en numerosas regiones. La afectación a la vida natural, los cultivos, las infraestructuras, dificultando el acceso al agua y provocando enfermedades impiden un verdadero progreso social y económico, causando secuelas de difícil superación en las poblaciones más vulnerables. 

El ODS 13 busca la adopción de medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos, situándose como prioridad en las políticas, estrategias y planes de países, empresas y sociedad civil, mejorando la respuesta a los problemas que genera, e impulsando la educación y sensibilización de toda la población en relación al fenómeno. 

Por otro lado, insta a los estados a contribuir económicamente para lograr los objetivos de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático y a cooperar con los países en desarrollo y pequeños estados insulares para mejorar su capacidad de tomar acciones por el clima, prestando especial atención a los problemas que genera en mujeres, jóvenes y comunidades marginadas.

En cuanto al sector privado, este representa un papel fundamental en la creación e implantación de estrategias para la reducción de emisiones de CO2 y la apuesta por  energías renovables en detrimento de las fósiles. Para ello se deberán reforzar la inversión en  I+D+i que permita el desarrollo tecnológico de soluciones sostenibles y eficientes en emisiones. 

¿Cuáles son las metas a cumplir dentro del ODS 13?

La Agenda 2023 establece las siguientes metas para la consecución del ODS 13, Acción por el Clima

13.1 Fortalecer la resiliencia y la capacidad de adaptación a los riesgos relacionados con el clima y los desastres naturales en todos los países

13.2 Incorporar medidas relativas al cambio climático en las políticas, estrategias y planes nacionales

13.3 Mejorar la educación, la sensibilización y la capacidad humana e institucional respecto de la mitigación del cambio climático, la adaptación a él, la reducción de sus efectos y la alerta temprana

13.a Cumplir el compromiso de los países desarrollados que son partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. Lograr movilizar conjuntamente fuentes de financiación para atender las necesidades de los países en desarrollo respecto de la adopción de medidas concretas de mitigación de riesgos para el clima y efectos de los desastres climáticos. Poner en pleno funcionamiento el Fondo Verde para el Clima capitalizándolo lo antes posible.

13.b Promover mecanismos para aumentar la capacidad para la gestión de un plan de acción por el clima en los países menos adelantados y los pequeños Estados insulares en desarrollo, haciendo particular hincapié en las mujeres, los jóvenes y las comunidades locales y marginadas.

¿Cómo puedo contribuir a cumplir este objetivo de desarrollo sostenible?

Las metas del ODS 13 involucran, sobre todo, a países e instituciones. Sin embargo, como decíamos, el sector privado tiene un papel de actor protagonista en el compromiso de reducción de gases con efecto invernadero. También a nivel particular podemos contribuir con nuestro comportamiento a combatir el cambio climático. 

Las medidas que el Pacto Mundial recomienda a las empresas son, entre otras, las siguientes: 

  • Incorporar la acción por el clima en la estrategia y la cultura empresarial integrándolo como pilar clave de la compañía.
  • Medir la huella de carbono en toda la empresa y su cadena de suministro para establecer objetivos de reducción de emisiones a corto y largo plazo.
  • Compensar sus emisiones de CO2 a través de proyectos de reforestación.
  • Invertir en adaptación climática a través de la innovación y la tecnología para la captura y almacenamiento de carbono.
  • Fijando un precio interno del carbono como herramienta de gestión.
  • Llevar a cabo un análisis de riesgos y oportunidades del cambio climático en toda la cadena de valor.
  • Formar a empleados, proveedores y al resto de grupos de interés en la lucha contra el cambio climático, para capacitarlos en sus puestos y concienciarlos en torno al fenómeno.
  • Incluir acciones de mitigación y adaptación al cambio climático en sus planes de acción.
  • Implantar sistemas de gestión ambiental certificados.
  • Disminuir gradualmente el uso de combustibles fósiles en las operaciones de la empresa y sustituyendo su uso por el de fuentes de energía renovable.
  • Fomentar la movilidad sostenible de empleados, proveedores y en la distribución de productos y servicios, para reducir emisiones provocadas por el transporte terrestre, aéreo y marítimo.
  • Establecer criterios de eficiencia energética, uso de energías renovables, reducción de emisiones y resiliencia a los desastres climáticos en los edificios e instalaciones de la empresa.
  • Introducir criterios de economía circular en las actividades de la empresa, utilizando los recursos naturales y materias primas de manera eficiente, empleando materiales reciclados, fomentando la reutilización, y reduciendo y valorizando los residuos.
  • Emitir bonos verdes para la financiación de proyectos sostenibles en áreas como las energías renovables, la eficiencia energética o el transporte limpio.
  • Respetar los ecosistemas y la biodiversidad en las operaciones de la empresa, llevando a cabo procesos para evitar impactos negativos en las áreas donde la empresa opere.
  • Diseñando e implementando planes de mitigación de riesgos, preparación, respuesta y recuperación en relación con los desastres naturales a través de la cadena de valor, especialmente en zonas de alto riesgo.

El cambio climático también requiere un cambio de hábitos en la ciudadanía que permitan reconsiderar qué es lo realmente necesario para respetar los recursos naturales y el planeta. Algunas recomendaciones de acciones individuales contra el cambio climático, son: 

  • Vigilancia en la adquisición y consumo de productos que puedan generar gases de efecto invernadero, tanto en envases como su origen, evitando los procedentes de agricultura y ganadería intensivas.
  • Consumir productos alimentarios de proximidad o también conocidos como productos de "kilómetro 0", a fin de evitar las emisiones generadas por los transportes.
  • Reciclar e intentar minimizar nuestro impacto generando menos basura.
  • Desplazamientos sostenibles: transporte público propulsado por energías renovables o mecánicas (bicicleta, patinetes…). Uso del tren en lugar del avión para viajes largos, en la medida en que sea posible. 
  • Uso eficiente y responsable del consumo de energía.
  • Alimentación equilibrada con una reducción en el consumo de carne (la masiva producción de carne es la responsable de entre un 25% y un 40% de las emisiones de CO2).

El ODS 13 como punto de partida para encontrar soluciones al cambio climático

Encontrar soluciones al cambio climático pasa por comprometernos con el umbral máximo del 1,5º de incremento de temperatura respecto a la época preindustrial. Sin embargo, todos los datos advierten de que, con las emisiones actuales, este incremento alcanzará los 3 grados para finales de siglo, con efectos desastrosos para la humanidad y el planeta. 

Superar el umbral del 1,5º traería como consecuencias:

  • La subida del nivel del mar más de un metro que haría desaparecer estados enteros y desplazar a millones de personas: en 2050 podría haber 1.000 millones de refugiados climáticos, según la ONU; 
  • El 30% de las especies podrían desaparecer al no poder adaptarse a los impactos del cambio climático; 
  • El aumento de la acidez del mar provocado por el cambio climático afectará a grandes poblaciones de peces, desapareciendo hasta el 90% de los arrecifes de coral. 
  • Los períodos de sequía que ya amenazan a los ecosistemas de agua dulce y a los cultivos en todo el mundo  se alargarían, además de la proliferación de incendios forestales.
  • Afectación de la salud: aumento de las alergias y las enfermedades tropicales provocadas por especies invasoras y cada de muertes por calor. 

Medio grado lo cambia todo, y está en nuestra mano emprender las acciones para ello. Sin embargo, muchos gobiernos están bloqueando los avances políticos hacia una economía descarbonizada. Los lentos avances y las barreras se evidencian cada año en las Cumbres Mundiales del Clima.

Las medidas necesarias para revertir esto son de diferentes tipos: 

  1. Medidas de transición energética y justicia climática: Es obligatorio reducir los gases efecto invernadero reforzando los esfuerzos de países y empresas para lograrlo. Los planes de reducción actuales nos llevan a que la emisión de estos gases aumentará un 10% en los próximos 10 años, superando el punto de no retorno. Es necesario llegar a compromisos firmes, legislar y regular este aspecto, e introducir política activas incrementando el número de actores y logros. 
  2. Financiación verde: Una forma de avanzar son las finanzas verdes, o el posicionamiento de una vía de inversión preferente de esta transición energética, abandonando el claro dominio sobre la economía de los combustibles fósiles. Aunque existen tímidos avances, los grandes flujos de inversión siguen estando desalineados con los objetivos del Acuerdo de París. ¿Qué futuro se está financiando? Los líderes del sistema financiero deberían incorporar la variable clima en sus estrategias, junto a una mayor transparencia en el destino de las inversionesEn el sector público, el Parlamento Noruego ha acordado que el Fondo Soberano de Riqueza de Noruega realice desinversiones en activos de empresas de combustibles fósiles y ha autorizado que se invierta en energías renovables.
  3. Mitigación y adaptación: Las medidas de mitigación (evitar la emisión de CO2 a la atmósfera, no son suficientes. El cambio climático es hoy una por lo que es fundamental comenzar a establecer políticas de adaptación. ¿Cómo respondemos a los cambios actuales, al deshielo de los polos, a la subida del nivel del mar, el incremento de la sequía o la desaparición de grandes masas forestales? ¿Cómo prevemos la seguridad y el progreso de poblaciones expuestas a inclemencias climáticas desastrosas? Establecer políticas y medidas, y prever la financiación que contemple la situación actual también es necesario. 
  4. Regeneración de la Naturaleza: El cambio climático provoca pérdida de biodiversidad y la pérdida de naturaleza acelera el cambio climático. Son dos caras de la misma moneda. El cambio climático es una de las grandes causantes de la pérdida de la naturaleza que sufre nuestro planeta y, a su vez, la destrucción de los ecosistemas naturales está alimentando la crisis climática. Es necesario restaurar, regenerar la naturaleza para restablecer el equilibrio. La reforestación de bosques es la herramienta más eficaz contra el calentamiento global. Los bosques son sumideros de carbono. Los manglares y los corales son barreras naturales contra las tormentas y la subida del nivel del mar y evitan la erosión. Poner en marcha soluciones “basadas en la naturaleza” consiste en
    trabajar con ella, recuperarla. Y no ir contra ella para resolver desafíos actuales. Nuestro reto es prevenir riesgos futuros recuperando el equilibrio en el que vivíamos.

Los investigadores estiman que con este tipo de soluciones, podemos reducir las emisiones hasta una tercera parte de lo que se necesita para cumplir los objetivos del Acuerdo de para que no se supere 1,5ºC respecto a las temperaturas preindustriales.


Puedes continuar aprendiendo sobre los objetivos de desarrollo sostenible en las siguientes entradas de nuestro blog.