robótica colaborativa

Cómo integrar la robótica colaborativa en la industria 4.0

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La llegada de las nuevas tecnologías a las empresas plantea desafíos como la integración de la robótica colaborativa. Se trata de una fórmula de trabajo que busca aprovechar lo mejor de los robots y las personas para mejorar la productividad y optimizar los recursos. Adoptando este sistema, ambas partes pueden prestar lo mejor de sí mismas trabajando en el mismo espacio de forma conjunta.

En este artículo queremos analizar cómo se puede llevar a cabo esta integración y qué ventajas suponen para las organizaciones que la ponen en marcha, dando un paso más en la industria 4.0.

¿Cómo funciona la robótica colaborativa?

La robótica colaborativa se basa en la interacción segura y eficiente entre humanos y robots en un mismo entorno laboral. A diferencia de los robots industriales tradicionales, los cobots están diseñados para trabajar codo a codo con los humanos. Esta disposición les permite compartir tareas y espacio de trabajo de manera segura. Los robots colaborativos suelen estar equipados con sensores avanzados y sistemas de visión que les permiten detectar la presencia y el movimiento de las personas cercanas, lo que les da la posibilidad de ajustar su velocidad y fuerza para evitar accidentes.

Además, la programación de los cobots tiende a ser más intuitiva y flexible, lo que facilita su integración en diferentes procesos de producción. Esta capacidad de colaboración directa con los trabajadores hace que la robótica colaborativa sea ideal para optimizar la eficiencia, aumentar la productividad y mejorar la ergonomía en una amplia gama de industrias.

La robótica y los trabajadores: juntos con un mismo objetivo

Esta integración de la robótica en entornos laborales promueve una colaboración armoniosa entre robots y trabajadores humanos, ambos persiguiendo un objetivo común: mejorar la eficiencia y la calidad del trabajo. Es cada vez, por lo tanto, más necesario contar con trabajadores que estén formados y entiendan cómo funciona la automatización y la robótica industrial aportando a la empresa un conocimiento más profundo de las nuevas tecnologías.

Hemos de tener en cuenta que a medida que la tecnología avanza, los robots colaborativos, o cobots, se convierten en aliados valiosos en tareas que requieren precisión y repetición, liberando a los empleados humanos para actividades más creativas y estratégicas. La sinergia que se está creando entre humanos y robots genera un ambiente de trabajo más seguro, donde las habilidades únicas de cada parte se complementan para alcanzar el éxito empresarial en la era de la automatización inteligente.

¿En qué se diferencian los cobots de los robots industriales?

Una vez que entendemos qué es la robótica colaborativa, hemos de bucear para comprender qué la hace especial con respecto a lo que conocíamos hasta el momento. Analizar las diferencias que supone el uso de estos cobots frente a los robots tradicionales más conocidos comúnmente:

  • Diseño y seguridad: Los cobots están diseñados para trabajar de forma segura junto a los humanos, con sistemas de detección avanzados que les permiten reaccionar ante la presencia de personas y evitar colisiones. En cambio, los robots industriales tradicionales suelen operar en áreas separadas y pueden representar un riesgo para los trabajadores debido a su tamaño y fuerza.
  • Flexibilidad: Los cobots son más flexibles en términos de programación y reconfiguración para diferentes tareas y entornos de trabajo. Pueden ser reprogramados y reubicados con relativa facilidad, mientras que los robots industriales suelen requerir configuraciones más específicas y son menos adaptables a cambios en la línea de producción.
  • Interacción directa con humanos: Los cobots están diseñados para interactuar directamente con los humanos, colaborando en tareas compartidas o proporcionando asistencia en la realización de actividades. En contraste, los robots industriales tradicionales suelen requerir barreras físicas de seguridad para evitar accidentes al interactuar con humanos.
  • Costo y tamaño: Los cobots tienden a ser más compactos y menos costosos que los robots industriales tradicionales. Esto los hace más accesibles para pequeñas y medianas empresas que buscan automatizar procesos sin realizar grandes inversiones en infraestructura. Los robots industriales, por otro lado, pueden ser más grandes, costosos y requerir una mayor infraestructura para su instalación y operación.

Tipos de robots colaborativos según la normativa ISO

Tipo 1

Estos robots colaborativos están diseñados para trabajar en un mismo espacio de trabajo con humanos, sin requerir medidas adicionales de seguridad como vallas o barreras físicas. Se espera que los operadores mantengan una interacción segura con el robot colaborativo y que este pueda detenerse o reducir su velocidad de forma segura en caso de una colisión inminente.

Tipo 2  

Estos robots colaborativos requieren medidas de seguridad adicionales para garantizar la protección de los trabajadores en caso de interacción cercana. A diferencia de los anteriores, los robots Tipo 2 pueden requerir dispositivos de detección y sistemas de seguridad más avanzados, como sensores de proximidad, cortinas de luz, o zonas de acceso restringido, para minimizar el riesgo de accidentes en entornos de trabajo compartidos.

Ventajas de integrar la robótica colaborativa en tu empresa

La integración de las nuevas tecnologías en la industria 4.0 cuenta con multitud de beneficios que mejoran el entorno laboral de los trabajadores. El poder contar con cobots posibilita mejorar cuestiones como la productividad, la seguridad o la calidad.

Aumento de la productividad

Los cobots pueden trabajar de manera continua sin fatiga y pueden realizar tareas repetitivas de forma eficiente, lo que aumenta la producción y reduce los tiempos de inactividad.

Mejora de la seguridad

Al trabajar en estrecha colaboración con los humanos, los cobots están diseñados con características de seguridad avanzadas que reducen el riesgo de accidentes laborales, lo que resulta en un entorno de trabajo más seguro para los empleados.

Flexibilidad en la producción

Los robots colaborativos pueden ser reprogramados y reconfigurados fácilmente para adaptarse a diferentes tareas y cambios en la producción, lo que permite una mayor flexibilidad en la fabricación y una rápida respuesta a las demandas del mercado.

Optimización de los recursos

La integración de cobots permite utilizar de manera más eficiente los recursos disponibles, como el espacio de trabajo y la mano de obra, maximizando así la eficiencia operativa y reduciendo los costos de producción.

Mejora de la calidad

Al automatizar tareas repetitivas y monótonas, los cobots pueden ayudar a reducir los errores humanos, lo que conduce a una mayor consistencia y calidad en los productos fabricados.

Reducción de costos laborales

Aunque la inversión inicial en robots colaborativos puede ser significativa, a largo plazo, pueden ayudar a reducir los costos laborales al realizar tareas de manera más eficiente y sin requerir los mismos niveles de compensación y beneficios que los trabajadores humanos.

Atracción de talento y retención de empleados

La adopción de tecnologías avanzadas como la robótica colaborativa puede mejorar la reputación de la empresa como un lugar innovador y atractivo para trabajar, lo que puede ayudar a atraer y retener talento en un mercado laboral competitivo. Los empleados también pueden beneficiarse al realizar tareas más interesantes y desafiantes, en lugar de las tareas repetitivas y monótonas que pueden ser automatizadas.

En definitiva, los robots colaborativos se han convertido en una herramienta imprescindible dentro de la cuarta revolución industrial y seguramente sean la clave para el cambió que traerá consigo la industria 5.0.

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